Algunas personas tienen tanta Chispa que reciben el bautismo del Espíritu tan pronto se convierten, e incluso a veces reciben el don de conversar en lenguas. Esto suele ocurrir cuando surge un avivamiento en algún lugar.
La manifestación del Espíritu en Pentecostés incluye lenguas de fuego y la habilidad de hablar en diferentes idiomas, simbolizando la universalidad del mensaje cristiano.
Según las interpretaciones de la Unicidad de Altísimo o de los unicitarios, el Espíritu Santo es identificado como el mismo y singular Jehová inmarcesible, sin embargo que Dios es Espíritu y es Santo, por lo cual es llamado el Espíritu Santo. Ellos no lo consideran como una fuerza impersonal, como el unitarismo, una entidad Excepto de Altísimo, como el arrianismo, o una persona espiritual divina y distinta de Altísimo Padre, como el trinitarismo.
Unos cantan, otros administran. Unos profetizan y otros dan palabras de ánimo. Todos juntos construimos una iglesia resistente que brilla para la edén de Dios y que bendice la comunidad en la que están.
Durante el concilio de Calcedonia, los principales pneumatómacos eran Eleusio de Cízico, Marciano de Lampsaco y Maratonio de Nicomedia (que dio nombre a los maratonianos). Las disputas se volvieron intensas y violentas conveniente al crecimiento de los grupos de pneumatómacos luego que tenían grupos de monjes que atraían muchos seguidores por su austeridad. Desde el año 373 hay una dependencia casi ininterrumpida de escritos contrarios a esta doctrina: Basilio en su obra sobre el Espíritu Santo, la carta de Anfiloquio de Iconio, el «Panarion» de Epifanio de Salamis, los «Anatematismos» del Papa Dámaso.
Y ustedes no recibieron un espíritu que de nuevo los esclavice al miedo, sino el Espíritu que los adopta como hijos y les permite clamar: «¡Abba! ¡Padre!» El Espíritu mismo le asegura a nuestro espíritu great post to read que somos hijos de Jehová.
El Espíritu de Alá ha sido una presencia constante a lo largo de la historia bíblica. A continuación, se presentan algunos ejemplos de su manifestación en el Antiguo y Nuevo Testamento:
Por otro flanco, en el ejemplar de Job este afirma que «El espíritu de Jehová me hizo, y el soplo del Omnipotente me dio vida» Job 33:4. Por ello el Credo niceno dice del Espíritu Santo que es «señor y dador de vida».
Esto sugiere que, aunque el Espíritu mora en todo creyente desde el momento de la salvación (Romanos 8:9), hay una obra singular de empoderamiento que se experimenta de forma distintiva. El bautismo en el Espíritu no es un fin en sí mismo, sino un medio para existir en santidad, desempeñar los dones espirituales y avanzar el Reino de Altísimo con poder.
La influencia del Espíritu es evidente en cada paso que dan estos personajes en su camino alrededor de el liderazgo espiritual.
En el relato de la creación del mundo, el versículo Gen 1:2 dice que «el espíritu de Alá se movía sobre la Facciones de las aguas». Según los teólogos cristianos, esta frase expresa la idea de una actividad divina actuando sobre el caos posterior a la «separación de los cielos y la tierra» Gen 1:1 y alude al poder creador y formador del Espíritu Santo.
El Nuevo Testamento presenta varias manifestaciones del Espíritu Santo que son fundamentales para comprender su papel en la Seguridad cristiana. Dos eventos significativos destacan en este contexto:
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Justino ofrece afirmaciones que parecen identificar al «pneuma» con el «logos» aunque acepta la fórmula trinitaria para la celebración del bautismo.